Fresno Americano

Fraxinus Excelsior, comúnmente conocido como Fresno Americano o árbol fresno, es nativo del este de Norteamérica pero también se desarrolla con éxito en muchas zonas de México.

El árbol fresno americano forma parte de las especies de hoja caducifolia, es decir, tiende a mudar sus hojas cada año y durante el invierno queda prácticamente sin ninguna hoja en su fronda. El fresno americano cuenta con más de una característica que le hace destacar, por ejemplo, puede llegar a medir hasta 30 metros de altura en su punto máximo, esto le hace un ejemplar ideal para conseguir sombra natural. Durante el verano, sus hojas tienen un color verde brillante pero a partir de otoño y durante el paso del invierno, antes de mudar, adquieren una tonalidad amarilla que proporciona mucho valor estético al paisaje.

El árbol fresno americano puede llegar a producir flores de color blanco, las cuales aparecen a finales de invierno y pueden llegar a permanecer en el árbol hasta comienzos del verano, atrayendo de esta manera a insectos voladores polinizadores.

En lo que respecta a su crecimiento, el árbol fresno americano crece rápidamente y tiene la capacidad de desarrollarse en todo tipo de suelos siempre y cuando se le proporcione sus debidos cuidados.

Esta especie es muy resistente al frío pero es poco tolerante a las zonas secas con calores extremo y constantes, de hecho, si lo que buscas es que tenga un crecimiento más rápido y frondoso, es ideal instalarlo en áreas donde exista mediana/alta humedad y la temperatura sea constantemente fresca y templada, aunque esto no significa una limitante para el árbol fresno americano pues si le proporcionamos los cuidados necesarios y le brindamos riego constante, puede crecer sin complicaciones.

Como se mencionó anteriormente, el fresno americano tiene una gran resistencia ante el frío y puede permanecer en el mejor estado durante las temperaturas de invierno que bajen hasta los -12 °C.  En resumen, el fresno americano es un árbol ideal para colocarse en jardines de mediano o gran tamaño para acompañar y mejorar el espacio natural. Este es un ejemplar de gran tamaño que proporcionará muy buena sombra y hará sentir un ambiente muy similar a los de los bosques y montañas. 

Al instalar el árbol fresno, se debe realizar de la siguiente manera:

Es importante primeramente preparar el pozo para el árbol. En Viveros Tamez de Allende recomendamos hacerlo de dimensiones 50% más amplias que las del contenedor que cubre la raíz, debido a que se rellenará el espacio sobrante con tierra negra, misma que se caracteriza por ser tierra de mejor calidad y que cuenta con los nutrientes necesarios para que la raíz se desarrolle con facilidad.

Una vez hecho el pozo y agregada la tierra negra a su alrededor, es ideal esparcir enraizador (que esté hecho a base de hormonas) en el hoyo para realizar la colocación del árbol de fresno en la parte central; es importante asegurar que la base del tronco quede a nivel del suelo, que no esté hundido o elevado.

Una vez que esté colocado el árbol fresno, así como rellenado el alrededor del pozo de tierra negra, enrollaremos un trozo de cartón pequeño sobre una parte media del tronco principal del árbol fresno americano, esto con el objetivo de enrollar en este cartón 4 cuerdas enrolladas y ancladas a su vez en el suelo a los 4 puntos cardenales.

Como punto final de la instalación, se deberá realizar el primer riego, el cual es vital para el fresno americano; debe ser abundante, hasta encharcar el diámetro de la raíz del árbol. Después de este primer riego, el primer mes (o hasta los primeros 3 meses, en caso de instalarse en canícula) deberá recibir riego diario. En caso de lluvia se suspenderán, pero siempre debemos buscar que la tierra permanezca húmeda.

Después de este periodo, bastarán de 2 a 3 riegos a la semana para que el árbol se desarrolle perfectamente bien.